Todo lo que coexiste en la naturaleza y que se pueda palpar y apreciar materialmente, son cosas, pero dentro de las cosas, podemos considerar de bienes aquellas de las que el hombre puede apropiarse y le sirven para satisfacer sus necesidades y además que no estén excluidas del comercio. El agua del mar, el sol, y una casa, son cosas, pero solo la última es considerada un bien.
Existen definiciones o conceptos que son usados con mucha frecuencia y son de entendimiento fácil, aunque su definición no resulta tan sencilla. Como ejemplos de este tipo de términos nos encontramos con Bien y Cosa, que tiene su origen etimológico en la lengua latina.
En este artículo se definirán ambos términos y se presentarán sus diferencias.
Bien:
El término Bien; se refiere a cualquier cosa, tangible o intangible, que sea útil para el hombre y le satisfaga, directa o indirectamente, alguna pretensión o necesidad individual o colectiva, o que contribuya a la prosperidad de los individuos.
En términos económicos, se definiría a los bienes como objetos inmateriales y materiales susceptibles de tener un valor o un costo. Y en lo jurídico, son todos aquellos merecedores de amparo por parte del derecho o sistema jurídico (vida, salud, familia, patrimonio, etc.), susceptibles de apropiación particular.
Existen diversos tipos de bienes, los cuales podemos diferenciarlos mediante criterios: según su carácter o escasez; están los bienes libres (pueden ser utilizados sin ningún costo, por ejemplo: el aire). Y los bienes económicos (pueden ser transformados mediante el esfuerzo y el trabajo humano). Estos últimos son el objeto de estudio de la Economía, y pueden clasificarse en bienes complementarios, sustitutivos e independientes.
Según su naturaleza, se encuentran los bienes de capital (se utilizan para la producción de otros, y no satisfacen las necesidades del consumidor final, ejemplo: edificios, maquinaria), y bienes de consumo (satisfacen las necesidades del consumidor final que están en condición de usarse o consumirse sin ninguna elaboración adicional); pueden ser bienes duraderos (largo tiempo) o no duraderos (corto tiempo).
También tenemos según sea su función, a los bienes intermedios (requieren de procesos posteriores antes de ser vendido a los consumidores, por ejemplo: el petróleo). Y los bienes finales (tienen el grado de terminación necesario para entregarlos a los consumidores, ejemplo: celular, auto) Por último, se tiene según sea su utilización o propiedad, los cuales se distinguen entre bienes privados (empresas) y públicos (gobierno).
Cosa:
La primera definición de cosa que menciona el diccionario de la Real Academia Española (RAE) alude a aquello que tiene entidad, sin importar si se trata de algo artificial, natural, abstracto o concreto.
Por lo general, de todos modos, la idea de cosa alude a algo inanimado, carente de vida. Los objetos, en este sentido, son cosas: los muebles, los automóviles, los aparatos electrónicos, las casas, etc. Por el contrario, las personas, los animales, las plantas y el resto de los seres vivos no son cosas.
Las cosas se pueden clasificar de la siguiente manera:
- Según su naturaleza física: Las cosas pueden ser corporales (se perciben por los sentidos y tienen existencia en la naturaleza) o incorporales (se perciben con el entendimiento y no se pueden tocar).
- Según su utilidad: Pueden ser consumibles (se extinguen con su primer uso) o no consumibles (no se extinguen con su primer uso).
- Según su capacidad comercial: Puede ser cosa comerciable (cosas que se pueden vender y comprar) o no comerciables (cosas que no se pueden vender ni comprar).
- Según su existencia: Pueden ser cosas futuras (cosas que no existen en el momento, pero según un proceso normal se pueden obtener a futuro, como, por ejemplo, una cosecha) y cosas presentes (las que existen en el momento de ser declaradas).
La diferencia básica entre ambos conceptos estriba en que el término cosa es el género y su diferencia específica es Bien, esto es, el significado de Cosa es amplio (Latu Censo) y el concepto Bien es restringido (Estricto Censo). Es decir, todos los bienes son Cosas, pero no todas las Cosas son Bienes.